En una visión más personal, las anécdotas que he vivido han hecho de mi una persona fuerte y que siempre busca una solución a los problemas.
Mi familia ha sido un gran apoyo siempre, mi padre es quiteño y mi madre es riobambeña, ellos aunque son de dos ciudades diferentes, pienso que su destino era encontrarse, ya que son la pareja perfecta, y puedo decir que mejor hogar no me pudo brindar Dios.
A demás de agradecerles a mis padres por darme la vida, les agradezco por obsequiarme un hermano, aunque es algo mayor a mí, siempre ha sido mi compañero de lucha, de miles de travesuras, y mi confidente. Finalmente, a esta hermosa familia, hace dos años aproximadamente, llegó a nuestras vidas una pequeña cachorrita de raza french poodle, a la cuál mi madre la llamo Pelusa, podría decir que esta perrita llego a mi vida por accidente ya que en casa mis padres nunca tuvieron la intención de adoptar un perro.
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Fuente; Personal |
Cuando era pequeña mis padres decidieron que la mejor escuela a la podía asistir era la Unidad Educativa "Santo Tomás Apóstol Riobamba", allí pase el mayor tiempo de mi vida, es más diría que este sitio se convirtió en mi segundo hogar, este lugar supo brindarme los mejores años, gracias a que tuve los amigos más increíbles del mundo, con los que pase momentos inolvidables, y ahora firmemente puedo decir que "Quién encuentra un amigo, encuentra un tesoro", y yo lo encontré.
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En conjunto con esto, intentando desarrollar varias destrezas, mi madre me inscribió en gimnasia, natación y también entre al grupo Scout, cada una de estas disciplinas me hicieron vivir experiencias muy gratas en donde conocí a personas muy interesantes, en especial cuando me fui a un encuentro internacional de los Scouts en México, allí conocí culturas, lugares e ideologías muy distintas a la mía, que al fin y al cabo te hacen madurar como persona.
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Después de transcurrir un largo tiempo en el colegio llegó la hora de hacerme una pregunta ¿Que voy a seguir en la Universidad? que muchas de las veces no supe responderla, pues desde pequeña me ha gustado experimentar de todo pero nada me ha obsesionado de tal manera que quiera hacerlo el resto de mi vida Esto no me preocupó tanto en el colegio ya que parecía que esa época iba a ser eterna, pero fue tan rápido como una estrella fugaz encontrarme en sexto curso, fue tan efímero encontrarme con la capa y el diploma una noche de junio, que tomar una decisión era necesario, lo que me causó una gran intriga y preocupación, después de un tiempo de escuchar a un amigo hablar de la Universidad de tecnología experimental Yachay, decidí investigar sobre el tema, fue cuando supe que lo que quería era entrar a esa maravillosa Universidad que ofrecía cientos de oportunidades, por lo que cuando me aceptaron el cupo decidí poner todo mi empeño para graduarme de ingeniera.